Fundamentos Tácticos del Voleibol

TÁCTICA EN EL VOLEIBOL


Desde el punto de vista metodológico es cierto que no deben separarse en lo posible los aspectos técnicos de los tácticos, sin embargo, para el mejor estudio de ellos se hace necesario distinguirlos.
El desarrollo táctico del voleibol está muy relacionado con las características técnicas de cada jugador.
La táctica se puede dividir en individual y colectiva, generalmente pensamos que la táctica colectiva o “del equipo” son principales, pero la táctica individual sumada permite que la táctica colectiva sea efectiva en marcadores y adecuado trabajo de equipo.

Podemos clasificar la táctica en:

INDIVIDUAL Y COLECTIVA

TÁCTICA INDIVIDUAL EN EL VOLEIBOL

La táctica individual en voleibol es la forma de pensar del jugador y en consecuencia moverse en el terreno condicionado esto a las reglas específicas del deporte (su área de juego, red, formas de manipulación del balón, etc.), al sistema y forma de juego del contrario y de su equipo, las condiciones externas que influyen sobre él en el juego.
Todo esto se cumple cuando se considera que no se trata solamente de cómo él piensa, sino cómo coordina estas ideas con sus compañeros de equipo (táctica colectiva). Por lo tanto el nivel del jugador será determinante para construir posteriormente el juego colectivo de un equipo.

Esta se divide en:

TÁCTICA INDIVIDUAL DEL PASADOR

Su táctica individual radica en primera línea y como fundamental en tratar de burlar el bloqueo contrario asegurando que los rematadores de su propio equipo ejecuten el mismo con la mínima cantidad de bloqueadores y hasta si es posible que se realice el remate sin bloqueo.

  • Para eso debe considerarse:
  • Parábola de salida del balón después de haber hecho contacto con el recibo.
  • El propio dominio técnico del pasador.
  • Los rematadores del propio equipo, características de cada uno de ellos (talla, función, posición, etc.), potencialidades y deficiencias de cada uno.
  • El sistema de juego del equipo
  • La forma de juego del equipo
  • La táctica colectiva y su objetivo
  • El bloqueo contrario (virtudes y deficiencias)




TÁCTICA INDIVIDUAL DEL SACADOR
La táctica individual del sacador está caracterizada por ser en la práctica la única forma de manifestación en voleibol que depende sólo del propio nivel técnico-táctico del jugador.

Ella estriba en tratar de:
  • Anotarse un punto directo sobre el contrario
  • Realizar un cambio de servicio (cambio de bola) para su equipo
  • Obstaculizar el ataque contrario de forma tal que no puedan construirlo de la forma más óptima.


Ello condiciona que el jugador tenga que considerar:

  • Estado momentáneos de los tantos (si está aventajado o no sobre el contrario).
  • Dominio y repertorio técnico del sacador
  • Objeto táctico – colectivo del equipo.
  • Las propiedades y condiciones de la sala de juego
  • Sistema de juego del equipo contrario
  • Lugar donde se encuentren los de mayores deficiencias en el recibo del equipo contrario.
  • Formación de recibo del contrario.




TÁCTICA INDIVIDUAL DEL DEFENSA DEL SAQUE
De los elementos técnicos es este el más pobre en cuanto a su repertorio táctico individual, pues la gran mayoría de sus acciones están condicionadas por la táctica colectiva del equipo. Por este motivo ella se limita a: que el contrario no lo sorprenda con el saque y provoque faltas directas con el mismo o no pueda contribuir de la mejor forma a la construcción del ataque de su propio equipo.
Para esto es importante que él considere fuertemente:

  • Su zona más deficiente para recibir
  • El jugador y zona donde debe enviar el balón
  • Si debe proteger a un compañero deficiente en el recibo
  • Confianza en su propio dominio técnico
  • Si se encuentra alejado o cerca de la red.
  • Ocupar su posición lo más rápidamente posible en relación con el área bajo su responsabilidad.
  • Conocer de antemano la especialidad en el ataque del jugador de turno.
  • Tratar de averiguar anticipadamente las intenciones del contrario
  • El sistema y forma de juego del equipo.




TÁCTICA INDIVIDUAL DEL REMATADOR
En la táctica individual del remate la importancia radica que mediante ella el jugador puede anotar un punto directo sobre el contrario (ella culmina la acción de ataque) o procurar de la misma forma el cambio del servicio, o por lo menos dificultar la defensa del contrario y no pueda estar en las mejores condiciones de construir un contraataque eficaz.
El objetivo táctico es burlar la defensa y el bloqueo contrario.

Para eso se debe tener en cuenta:

  • Su función como rematador (principal o auxiliar, etc.)
  • Posición que ocupa en el terreno en el momento que debe producirse el ataque (zona IV, III, II o zaguero).
  • Posibilidades de recibir el pase, tipo de él y la calidad del mismo.
  • Sistema y forma de juego del equipo
  • La combinación con la cual se pretenda realizar el ataque (penetración u otra forma)
  • Si existen posibilidades de ejecutar un cruce (23, 32, etc.), su responsabilidad de cumplir con su tarea táctica.
  • Su propio repertorio técnico
  • El bloqueo del contrario
  • Formación de la defensa del contrario
  • Sus propias posibilidades físicas y volitivas




TÁCTICA INDIVIDUAL DEL BLOQUEADOR
Este es un elemento técnico el cual su táctica ya sea individual o colectiva va a ser decisiva para el resultado final de la acción. La táctica individual está dirigida principalmente desarrollar de manera efectiva:

  • Detectar la dirección en la que se producirá el remate
  • La forma de colaboración de brazos y manos
  • El desplazamiento de las manos y brazos por encima del borde superior de la net en el último momento del remate del contrario.
  • Posición ventajosa con vista a poder desplazarse con la mayor facilidad posible y rapidez hacia el lugar del salto.
  • Selección del lugar para efectuar el salto.
  • Determinación del momento para el salto
  • Conocer anticipadamente las intenciones del contrario
  • Altura que debe alcanzar en el salto (no siempre es máxima).
  • La táctica del equipo.
  • Función y tareas específicas propias
  • Sus propias potencialidades físicas.




TÁCTICA INDIVIDUAL DEL DEFENSOR DEL CAMPO (DEFENSA DEL REMATE)
La táctica de la defensa del campo al igual que en la defensa del saque (recibo) está muy supeditada a la táctica colectiva del equipo. Independientemente de ello las acciones individuales del jugador de la defensa serán decisivas para la victoria del equipo.
EL objetivo táctico será defender el balón posibilitando un contraataque y el jugador debe desarrollar el desplazamiento y coordinación de sus movimientos con el objetivo de colocarse en la posición más ventajosa con relación a:
Estar en la zona lo más temprano posible hacia la cual el rematador contrario supuestamente dirigirá el balón (anticipación).
Tener la suficiente memoria táctico-técnica para resolver lo antes posible situaciones en las cuales debe hacerse contactos con balones que rebotan el bloqueo (reacción).
Según la zona en lo que se encuentra, ser capaz de decidir rápidamente si permanece en su zona de origen o se desplaza a defender un engaño (toque).
Por lo tanto considerará:

  • Su propio nivel técnico y repertorio técnico-táctico
  • Evaluar desde el recibo las posibilidades de ataque del contrario
  • Cubrir lo más temprano posible su área para defender
  • Detectar las intenciones del rematador contrario (anticipación) y sobre esa base seleccionar el lugar propicio para defender.



TÁCTICA COLECTIVA EN EL JUEGO DEL VOLEIBOL

SISTEMA DEL JUEGO
El concepto de sistema desempeña una importante función en nuestros días, en la filosofía, la ciencia, la técnica y en las actividades prácticas. Se entiende por sistema el conjunto de elementos que tienen relaciones y conexiones entre sí, y que forman una determinada integridad.
De acuerdo con lo planteado anteriormente, el sistema de juego respectivo para un equipo determinado, contiene la distribución más exacta posible de las funciones, las posiciones y los espacios a cubrir, tanto para los primeros seis jugadores, como para los suplentes en todas las formaciones y fases de la defensa y el ataque. Eso también incluye los medios y procedimientos a emplear.
Para la organización y aplicación del sistema de juego hay que considerar lo siguiente:

  1.  Tendencias internacionales en este sentido.
  2.  Calidad y características psicológicas de pasadores y atacadores, tanto de forma individual como colectiva (compatibilidad psicofisiológica).
  3.  Nivel técnico y táctico de los jugadores.
  4.  Edad de los jugadores.
  5.  Años de entrenamiento.
  6.  Cantidad de rematadores principales o auxiliares, así como la utilización de estos como atacadores rápidos en el remate, y su maestría en el contraataque.
  7.  Nivel cultural de los jugadores, que incluye el nivel de desarrollo de las cualidades morales, volitivas, políticas e ideológicas.

SISTEMAS DE JUEGO MÁS UTILIZADOS

Los sistemas de juegos más popularizados actualmente son el 4-2, 6-2 y 5-1. Este último según la tendencia mundial es el que tratan de adoptar la mayoría de los equipos. Ahora bien, ¿qué significa un sistema de juego? Significa, en primer orden, que se conforme sobre la base de las categorías de los jugadores (funciones) en el voleibol:

Rematador principal.
Rematador auxiliar.
Pasadores (también suelen dividirlos en principales y auxiliares).

En segundo orden, que se distribuyan las posiciones (zonas) para cada jugador, por ejemplo:

CINCO ATACANTES Y UN PASADOR (5-1) PRIMERA VARIANTE


AA
AP
AA
AA
AP
P
AA – Atacante auxiliar. AP – Atacante principal. P – Pasador
Las nuevas tendencias del mundo manifiestan que los equipos deben estar conformados de manera que dentro de los seis primeros jugadores se encuentren dos atacantes rápidos por la zona 3, y dos atacantes de contraataque por las zonas 4 y 2, estos se destacan por poseer grandes posibilidades combinaciones en la net. La característica del pasador como único conductor del juego en este sistema, debe ser la de un jugador de grandes capacidades físicas y de un alto desarrollo de las capacidades volitivas. En algunos casos existe un atacante auxiliar que se encarga de realizar la función de pasador en el contraataque, al cual se le denomina jugador universal.
CUATRO ATACANTES Y DOS PASADORES (4-2)

PA
AP
AA
AA
AP
PP
PA – Pasador auxiliar. AP – Atacante principal. AA – Atacante auxiliar. PP – Pasador principal.
Las características de los atacantes principales y auxiliares en este sistema de juego, se corresponden con las del sistema 5-1; sin embargo, el pasador auxiliar tiene la particularidad de poseer mayor responsabilidad en el ataque y en el bloqueo que el pasador principal.

La formación de un equipo puede manifestarse a través de las siguientes variantes:
Sistema de juego 5-1 (cinco atacantes y un pasador)
Sistema de juego 4-2 (cuatro atacantes y dos pasadores)

SEGUNDA VARIANTE

AC
AR
AC
AC
AR
P
AC – Atacante de contraataque o de combinaciones (posición 4 y 2). AR – Atacante rápido. P – Pasador
Como tercer orden, en el caso de jugadores de cambio, debe existir una distribución (sustitución) de posiciones:

Rematador principal por rematador principal
Rematador auxiliar, por otro de igual categoría
Pasador por otro pasador

Todos ellos son introducidos en el juego (preconcebido) con tareas concretas, tanto especiales de ellos como también haciendo suyas las del compañero por el cual entró a jugar.

En los jugadores de cambio también existirán los especialistas por fundamentos técnicos, por ejemplo:

  1. Bloquear en la zona 3
  2. Rematar pases determinados en las combinaciones o cruces que se seleccionan.
  3. Defender zonas determinadas en el terreno
  4. En las formaciones de recibo (con 1, 2 ó 3 jugadores) se plasma claramente tanto el espacio a cubrir en el terreno por los que van a recibir (también los de cambio), como las funciones específicas para el resto de los jugadores que tendrán la plena responsabilidad de recibir donde quiera que está el balón (en algunos equipos de buena calidad, muchas veces esta responsabilidad recae hasta en un solo jugador).


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